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Las dos jornadas del 21º Congreso Nacional de la Recuperación y el Reciclaje, en Ifema Madrid se inauguró con las intervenciones del presidente de la Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje, FER, Ion Olaeta, Rafael García, viceconsejero de Medio Ambiente, Agricultura y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, y David Moneo, director de la FSMS.
Tras dar la bienvenida a los más de 450 congresistas asistentes, Olaeta destacó que el evento organizado por FER “se ha convertido en la gran cita anual para nuestro sector” y su celebración, en paralelo a la Feria Internacional de Recuperación y el Reciclado, SRR, de la que la federación es promotora, “convierten a Madrid estos días en la capital del reciclaje”.
El máximo responsable de FER subrayó el crecimiento de la patronal española del reciclaje: “En el año 2002 contábamos con 52 socios y ahora mismo somos 315 que, a su vez, cuentan con casi 500 instalaciones, lo que nos ha permitido reforzar nuestra representación institucional a nivel internacional y nacional para desplegar nuestro objetivo de dar más voz a los gestores en todos los ámbitos posibles”, añadió.
Esa presencia de FER en los principales organismos y foros sobre reciclaje “es clave”, afirmó Olaeta, “porque en una coyuntura como la actual, marcada por la inestabilidad geopolítica a nivel internacional, los vaivenes de la economía, y, en paralelo, con una transición decidida en Europa hacia la economía circular y la neutralidad climática, la industria del reciclaje tiene mucho que decir y más ahora, con la nueva Comisión y Parlamento Europeo que se van a conformar tras las elecciones europeas que se acaban de celebrar”.
El presidente de FER realizó en su discurso un alegato a favor del sector reciclador: “Uno de los ejes estratégicos de FER es situar al reciclaje en el centro de la agenda verde industrial europea, tendiendo un puente entre las políticas de neutralidad climática y de economía circular de la Unión Europea, defendiendo que nuestra industria es fundamental para la descarbonización, y que, a partir de los residuos, producimos y comercializamos materias primas recicladas esenciales, y gracias a las inversiones, el esfuerzo y la dedicación de los gestores de residuos, hoy es posible que el conjunto de la sociedad pueda, al menos, atisbar la meta de una verdadera economía circular”.
Sin embargo, “cada vez es mayor el camino de obstáculos normativos, administrativos y burocráticos al que se enfrentan nuestras empresas y todas las nuevas normativas que se han aprobado o se aprobarán en los próximos meses tienden a un control exhaustivo por parte de la administración, incrementando las cargas administrativas o el importe de las fianzas y los seguros, a pesar de que rara vez se incrementa la protección ambiental, que debería ser el espíritu de estas nuevas legislaciones”, concluyó Olaeta.
Por su parte, Rafael García, viceconsejero de Medio Ambiente, Agricultura y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, señaló: “Llevar a cabo políticas que cuiden el medio ambiente y garanticen el bienestar de los ciudadanos en entornos más verdes y saludables pasa por una economía circular fuerte y sostenida en el tiempo”.
“Desde la Comunidad de Madrid sabemos bien que la labor de recuperar y reciclar supone un gran reto, pero también una enorme oportunidad para la que se necesitan infraestructuras avanzadas, tecnología y soluciones innovadoras”, reconoció, “por lo que es fundamental el protagonismo y la participación de las empresas para seguir defendiendo un modelo de colaboración público-privada que fomente oportunidades de crecimiento, favorezca el empleo verde y duradero, reduzca el impacto ambiental y atraiga industria, emprendimiento e inversión a nuestra región”.
“Desde el Gobierno de la Comunidad de Madrid no solo contribuimos a afianzar la economía circular de la región, sino a crear en torno a 5.000 empleos directos anuales relacionados con la gestión de residuos y a aportar 1.100 millones al PIB de la región”, concluyó.
Por último, David Moneo, director de FSMS, agradeció la confianza de FER al escoger, una vez más, el escenario de la Feria SRR para la celebración de dicho evento: “Una feria líder en su ámbito y firmemente comprometida con la economía circular, junto con el resto de convocatorias que integran FSMS, la Feria TECMA y el Foro de las Ciudades de Madrid”.
Asimismo, destacó al reciclado como uno de los ejes principales que contribuyen al desarrollo del sector, por lo que “debe estar presente en las políticas a desarrollar, así como en la colaboración público-privada”.
Moneo se refirió también al éxito de la presente edición de FSMS 2024, capaz de generar un ecosistema de negocio de primer nivel, y en particular, al récord registrado por SRR, “con más de 80 empresas expositoras, incluidas 30 nuevas, un crecimiento del espacio expositivo del 40%, y de más del 45% en la participación internacional” y concluyó su intervención destacando el papel que desempeña SRR como complemento al espacio de análisis que representa el congreso de FER.
En la primera mesa redonda de la jornada, ‘El cambio generacional en las empresas familiares. Transición y perspectivas’, los ponentes trataron el relevo generacional en la empresa familiar, hablando de comunicación, crecimiento, diversificación y profesionalización. Para ello, se dieron algunas claves para un correcto cambio generacional, que pasa por anticiparse a los hechos y estar preparado; separar a la familia de la empresa; no llevar a la comida del domingo los temas del consejo de administración; respetar y valorar el legado; ser cuidadoso con los tiempos y anticiparse para intentar hacer las cosas con calma y sin precipitación, y rodearse de los mejores profesionales sean familiares o no familiares.
A continuación, se desarrolló la mesa ‘El reciclaje del futuro. Hacia la empresa 5.0’ que se centró en las personas, en el desarrollo tecnológico y digital y en la gestión del cambio. Una industria 5.0 debe de estar centrada en el ser humano, debe ser resiliente y sostenible. Estos deben de ser los pilares de la estrategia de cualquier organización. Necesitamos organizaciones ágiles y resistentes, con tecnologías flexibles y adaptadas, capaces de anticiparse, reaccionar y aprender, oportuna y sistemáticamente, de cualquier crisis.
La ponencia ‘De Recursos Humanos a Personas y Cultura’ se centró en la necesidad de reflexionar sobre el cambio de paradigma de la clásica gestión de recursos humanos hacia una gestión de personas y cultura. Una transición donde el área de personas es un partner de la estrategia de la empresa y permite acompañar a la misma en su visión y el momento que viva para alcanzar los objetivos.
El congreso finalizó con la ponencia ‘La inestabilidad de los mercados, ¿riesgo u oportunidad?’ donde se analizó la situación actual de los mercados de materias primas recicladas esenciales y se concluyó que, aunque estamos en tiempos de una volatilidad excepcional, sin llegar a ser histórica, nos tenemos que quedar con el mensaje de que cualquier tipo de riesgo siempre lo podemos gestionar.