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STADLER diseña y construye en Asti y Parma las plantas de clasificación de G.A.I.A. e IREN
A medida que se acercan los objetivos de la Agenda 2030, las empresas de servicios medioambientales invierten cada vez más en centros de reciclaje que logren acercarnos al objetivo de residuo cero, convirtiendo dichos residuos en materias primas secundarias para que puedan volver al ciclo comercial reduciendo al mínimo el volumen de residuos.
En esta línea, G.A.I.A. Spa e Iren Ambiente (titular del 45% de G.A.I.A que se encarga de prestar servicios medioambientales a una población de más de 3 millones de personas) solicitaron el diseño y la construcción de nuevos centros de reciclaje en Asti y Parma a STADLER, empresa alemana especializada en la planificación, producción y montaje de plantas de clasificación y reciclaje llave en mano.
Las dos plantas tenían requisitos diferentes: en Asti, clasificación de envases de plástico a partir de una recogida selectiva y, en Parma, la clasificación de plástico, papel y cartón.
Gracias al enfoque personalizado de STADLER, que es capaz de prestar soluciones incluso para los cambios solicitados durante la fase de construcción, la colaboración entre las empresas fue un éxito.
La nueva planta de clasificación del Centro de tratamiento de residuos de Asti
Esta nueva planta, recientemente inaugurada el pasado mes de octubre y cuyo objetivo es clasificar envases de plástico y metal a partir de una recogida selectiva de residuos, tiene un papel importante en la gestión de residuos del norte de Italia. Gracias a una inversión de 10 millones de euros, esta planta podrá procesar cada año 50.000 toneladas de materias derivadas de una recogida selectiva de residuos.
“La planta de clasificación es como una mina a cielo abierto, salvo que, en lugar de extraer materias primas de la tierra, las recupera y así puede evitar la dispersión de plásticos en el medioambiente o la saturación de vertederos que ya no necesitan recibir materias recuperables”, indica Flaviano Francaro, CEO de G.A.I.A. y Director Técnico de Iren Ambiente Spa.
La nueva planta de Iren Ambiente en Parma
La planta de Parma, que está a punto de finalizarse e inaugurarse, está diseñada para tratar dos flujos diferentes de materia derivados de la recogida independiente de papel y plástico. Se trata de una de las plantas más avanzadas de Italia en lo que respecta a la clasificación de papel y cartón.
Para este centro, STADLER ha diseñado y construido dos líneas de clasificación con un alto grado de integración que consiguen una alta eficiencia del espacio porque comparten el sistema de empacado.
“Valoramos el enfoque profesional de los ingenieros de STADLER, así como su rápida capacidad de respuesta a la hora de implementar una petición de última hora en la línea de clasificación de papel. Pedimos incorporar cuatro clasificadores ópticos NIR y STADLER fue capaz de hacerlo en el ajustado plazo que manejábamos”, opina Fracaro.
La línea de clasificación de plásticos, que tiene una capacidad de 9 t/h, procesa las botellas de PET+HDPE+PP, film PE+PP, plásticos voluminosos, envases de plástico mezclado, metales férricos y no férricos; la línea de clasificación de papel, cuya capacidad es de 20 t/h, procesa el cartón, el papel mezclado y el papel revista.
Las dos líneas cuentan con áreas de entrada diferentes, pero comparten la sección de salida y la línea de empacado. Cada línea tiene una sección de alimentación, otra para la clasificación mecánica y óptica, una cabina de clasificación manual para materiales voluminosos y una línea de almacenamiento y empacado.